En la tarde de este lunes, 8 de abril, la ciudad de Valencia y Naguanagua se vieron envueltas en una densa nube de humo, producto de múltiples incendios que afectan los cerros y áreas con vegetación en ambos municipios. Según el rescatista Jacobo Vidarte, esta situación se agrava debido a la dirección del viento que ha favorecido la propagación de las llamas.
Uno de los focos de incendio más preocupantes se encuentra en el cerro El Casupo, donde las labores de extinción están avanzando favorablemente. Sin embargo, en Carialinda, al norte de Naguanagua, las autoridades de Inparques enfrentan dificultades para acceder a la zona debido a su compleja geografía.
Por otro lado, en el cerro El Café se registra una situación más crítica, ya que se reportan numerosos puntos con fuego activo y las ráfagas de viento están avivando las llamas, dificultando las labores de combate. La colaboración de los cuerpos de bomberos y autoridades ambientales es fundamental para controlar la situación y evitar que los incendios se propaguen aún más. Se espera que las condiciones climáticas mejoren para facilitar las tareas de extinción y proteger la flora y fauna de la zona.